Cuadro en acuarela del faro de La Guardia

Cuando estaba pintando este cuadro y sobre todo cuando pinto cuadros de este tipo con el mar en tempestad que azotan rocas.

O como en este caso un pequeño faro que indica la entrada a puerto sobre un espigón me viene a la cabeza una pregunta: ¿Qué pensaría William Turner de este cuadro si lo viera? ¿le gustaría acaso? , no lo se, las respuestas se diluyen con dudas.

En cualquier caso mi intención cuando realizo este tipo de escenas es la captura de un momento dado y porque no la representación de un estado de ánimo en particular…

Cada cual puede sacar sus propias conclusiones en este punto, lo cierto es que me gusta representar el mar con ese movimiento y volumen de sus olas tan poético, con tanta carga de misterio debido a su inmensidad y fuerza, algo desconocido que nos trae y nos arrebata muchas cosas.

En el cuadro un pequeño faro se alza al final de un espigón impactando las olas sobre él y aguantando como si de una metáfora de la vida se nos apareciera ante nosotros.

Al fondo en el cielo un pequeño tono azul y el color azul que cae como una cortina de agua desde la parte superior nos indica la fuerza del viento. Casi a la altura del faro una ola se levanta de un color verde debido a la luz que penetra a través de ella.

Un cuadro en el que una vez más la fuerza del mar y los elementos se pone de manifiesto, algo que Turner venía buscando, la naturaleza en estado puro, la representación de un momento concreto, la captura de ciertos sentimientos sobre el lienzo o el papel, algo más que pintura, emociones.