Acuarela de un atardecer en el Valle de Liébana

Acuarela de un atardecer en el Valle de Liébana, Cantabria.

El sol despide el día en este cuadro en acuarela de un atardecer en algún lugar del Valle de Liébana.

Se trata de una acuarela de 29×21 cms en el que el sol como un punto luminoso tiñe el cielo de diferentes colores anaranjados y amarillos en la zona del horizonte y una masa de nubes no muy densas se tornan de tonos morados y violetas.

Un cuadro en el que la luz y la sombra van de la mano formando una buena pareja como suele suceder en la mayoría de los cuadros de pintura de paisaje.

En este caso los árboles y la zona de la tierra que se aprecia en primer término se muestra oscura de tonos verdes oscuros ya que permanece en sombra por la colina de árboles que se asoma desde la parte derecha del cuadro.

Dentro de la parte oscura de la pintura hay tonos más claros y más oscuros como por ejemplo las siluetas de los árboles que se ven ante nosotros.

También se adivina alguna casa en la ladera de la montaña entre penumbra.

Por otro lado las montañas de la lejanía aparecen azuladas e iluminadas parcialmente.

La pincelada utilizada en este cuadro es diversa ya que va desde la pincelada larga y ancha con el color bastante diluido del cielo con la intención de mezclar colores entre si hasta la pincelada más pequeña y minuciosa de la parte de la vegetación de colores verdes.

Un cuadro con multitud de detalles en este sentido ya que se trata de una obra en la que la luz nos habla a última hora del día.